A medida que "baje" tu panza, te molestará menos la compresión de las costillas bajas y sentirás más la presión hacia abajo. Tal vez sientas dolores en la pelvis al caminar y tengas que hacerlo lentamente.
El gran volumen de tu panza puede hacer que choques con las paredes, que tengas dificultades para desplazarte o que se te caigan objetos en forma involuntaria. Cuidado con los accidentes. Te conviene descansar mucho y no apurarte al hacer ninguna tarea.
Tus pechos, gracias a las hormonas que produce la placenta, comienzan a prepararse para cumplir la función de amamantamiento. Ahora están llenos de calostro –el primer alimento que recibirán tus gemelos, antes de que se produzca la bajada de la leche-.
Si nacieran a partir de este momento, tus gemelos ya serían considerados "de término", aunque no lleguen a la semana 38 -a partir de la cual se considera el término para un embarazo simple-.
El intestino de cada uno de tus bebés está lleno de meconio, una sustancia verde oscuro que es una mezcla de sus secreciones, lanugo y células intestinales. Lo evacuarán en el parto o una vez nacidos.
* Te recordamos que estos hitos del embarazo son aproximados, ya que cada embarazo es tan único y diferente como la mamá que lo vive, y como los bebés que va a tener. Ante cualquier duda, te sugerimos que siempre consultes a tu médico.
Como el crecimiento de los bebés múltiples es muy variado y la mayoría de ellos alcanza un grado menor de peso que los bebés de embarazos únicos, se han consignado los pesos y las medidas de los bebés de embarazos únicos. Por eso, hay que tener en cuenta que estas medidas pueden ser distintas en el caso de tu embarazo múltiple y además, seguramente tus bebés tendrán variaciones entre sí. Cualquier duda que tengas consultá con tu obstetra.